Vania Pigeonutt
A los seis años pidió a los Reyes Magos que le respondieran una carta sólo para ver cómo era la letra de sus majestades. Primero escribía corazones, cartas cifradas de amor y poemas malos. Después entendió que la vida es como la poesía de Vallejo y el buen mezcal: profunda, ruda y deliciosa. Su consigna en el periodismo es llenarse de lodo los zapatos. Ha cubierto desde asesinatos y desaparecidos hasta historias virales, como la de un niño que vende empanadas en 10 idiomas. Es coautora del libro Ayotzinapa, La travesía de las tortugas (Proceso, 2015) y No basta encender una vela (Rayuela, 2015). En 2015 obtuvo el tercer lugar del Premio Alemán de Periodismo Walter Reuter "El fracaso de la guerra contra las drogas" con el texto "Los niños del opio". Es becaria del Programa Prensa y Democracia en la Ibero en la edición "Periodismo Narrativo" (enero-junio 2017).